Lo más positivo del Foro fue la gran cantidad de gente que se unió
El Presupuesto Participativo en la ciudad de San Miguel tuvo varias aristas que fueron limándose a medida que se sucedía el tiempo. Primero fue lograr la reglamentación, luego la puesta en marcha de los foros, por último, el inicio de las obras. Todos estos aspectos se fueron resolviendo, y lo más importante, con una dinámica impuesta desde los barrios.
Barrufaldi es un barrio lindero a Campo de Mayo y Camino del Buen Aire. Un territorio que, luego de las distintas políticas destinadas a someter y empobrecer a los pueblos, enumeraba las características que suelen observarse en todo el Conurbano: fragmentación social, referentes sociales desacreditados, instituciones débiles, condiciones de vida insalubres… De todos modos, muchos pobladores y organizaciones creyeron que otra realidad era posible, y a partir del Presupuesto Participativo comenzaron a poner a Barrufaldi de pie.
Daniel Vásquez, de 32 años, fue elegido delegado barrial para el año 2008. Fue un informante clave, y presenta a una comunidad que ha logrado organizarse en torno a resolver sus necesidades.
De todas las instituciones que sufrieron la crisis social argentina, un espacio comunitario pudo mantener su institucionalidad. Se trata de la Capilla Stella Maris. Fue desde allí que comenzó a difundirse en el Barrio la posibilidad del Presupuesto Participativo. Explicaba Daniel que un grupo de vecinos comenzó a informar a toda la comunidad y a las familias durante las misas. Es que la Iglesia “era el único lugar que no estaba cuestionado”.
Sorpresivamente (o no), comenzaron a sumarse una a una las instituciones del barrio. “Mucha gente que hasta hace unos meses no podía verse la cara se unió: la sociedad de fomento, la salita, el comedor”, aseguraba el entrevistado, enfatizando: “fue lo más positivo del Foro”. El trabajo no cesó aquí. Tantos años de políticas que fragmentaron a la sociedad no fueron en vano. Esto obligó a que las primeras reuniones de vecin@s y organizaciones sean de carácter (in)formativo. Incluso algunos vecinos suponían que el Presupuesto Participativo era un aporte a los micro-emprendimientos, pero como suele decirse, “el pueblo está para más”, y rápidamente comenzaron a vislumbrarse los proyectos del barrio.
No fueron pocas las dificultades que sortearon en Barrufaldi, pero es mayor la satisfacción cuando se cumplen los anhelos. En una zona rodeada de operadores relacionados a sectores “carapintadas”, de cara a la planificación para los proyectos 2009 comenzaron a circular diversos rumores entre los vecinos. En ese momento, el cambio en el barrio fue evidente, “Las organizaciones comenzaron a reagrupar a los vecinos. Fue sorprendente la posición de la Sociedad de Fomento en este rol”, comentaba Daniel. El Presupuesto Participativo ya no era cuestión de algunos y algunas corajudas, sino un destino colectivo comunitario, que se promovía desde todos los ámbitos. No fue casual, que, paralelamente, las instituciones que hasta no hace poco estaban casi vacías, ahora albergan a muchas familias y brindan mayores servicios a la comunidad.
¿Cómo se comunica el barrio?
Barrufaldi tiene una extensión considerable en comparación a otros barrios: 45 manzanas. Además, está divido en tres sectores: uno totalmente asfaltado, con la mayoría de población desvinculada de las cuestiones comunitarias. Otra zona muy empobrecida y en condiciones de vulnerabilidad. La tercera corresponde a un perímetro de nueve manzanas, que históricamente ha sido el núcleo más activo del barrio. Para los movilizadores del Foro, las primeras dos zonas eran un desafío para la convocatoria. Para Vázquez, “la Capilla fue clave, llegan a mucha gente”, no sólo anunciando en las misas de los sábados, sino con el trabajo de Mary volanteando casa por casa.
Las instituciones, el boca a boca, los lugares de reunión. De ese modo se informa el barrio, aunque la posibilidad de realizar una publicación es vista con muy buenos ojos. Adelantándose a esto, cuentan con un blog (barrufaldidepie.blogspot.com) que ha sido muy importante para cobrar visibilidad.
Lo trabajado
Este barrio, cuenta además con el Foro de jóvenes, desde su primer momento. Allí participan tanto las murgas del barrio como los chicos y chicas vinculadas al club del barrio y la Sociedad de Fomento. En las últimas semanas, además, se han acercado para tomar parte en el Campamento Regional de Jóvenes que organiza la Carta Popular para noviembre. Será esta una instancia clave para fortalecer estos procesos de Democracia Participativa, que los más chicos desarrollan de modo mucho más natural que otras franjas etarias.
En cuanto a los proyectos, en una primera etapa para 2008 se decidió la construcción de un tanque de agua, el lanzamiento de un espacio cultural y una ludoteca para el Jardín del barrio, junto a cursos de informáticas para todos. Quizá por el trabajo de Daniel (quien es licenciado en Educación de la Universidad Nacional de Luján), pero también por la pluralidad de organizaciones que se dieron cita en el Foro, en este barrio fue donde más proyectos culturales se presentaron. En relación a la ludoteca, la necesidad surgió cuando los vecinos buscaban espacios para la realización de actividades y se encontraron con un Jardín de Infantes que carecía de juguetes, juegos y bancos, usando carreteles de cable para sentarse. Claramente fue uno de los proyectos menos discutidos, del mismo modo que el “Agua para el barrio”.
Para 2009, al tanque de agua, se sumará una red. El barrio posee gas natural, pero no agua corriente. Este proyecto no será la solución, pero si un paliativo para la situación. Los otros proyectos elegidos son: “Mejor salud” (refacción de la Sala de primeros auxilios), “Paso firme” (construcción de veredas), “Saber es poder” (Biblioteca popular). Las obras ya han comenzado en algunos barrios del distrito, Barrufaldi espera ansioso.
La comunidad ya está organizada, y avanza a paso firme hacia el 2009. Esperan que el Presupuesto Participativo se consolide en más barrios. En relación a esto, Daniel Vázquez concluía diciendo: “La organización y la elaboración de proyectos se logró. El rol de las organizaciones (en relación al Foro Distrital de organización y seguimiento) debería ser el sostén político. Parece que lo institucional fue lo que más costó, cuando se quieren frenar los proyectos, en esa instancia, tienen que tener mucha presencia para que se cumpla todo lo que se realizó”.
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